"El color expresa algo más recóndito y subjetivo que el mundo natural. Es la manifestación de la sensibilidad, las creencias y las fantasías humanas. En la valoración y el uso de los colores se vuelca la espiritualidad de una época, las luces y las sombras de las personas. Por eso, los artistas auténticos no debían sentirse esclavizados por el mimetismo pictórico frente al mundo natural: bosque verde, cielo azul, mar gris, nube blanca. Su obligación es usar los colores de acuerdo a urgencias íntimas o al simple capricho personal: sol negro, caballo azul, nubes verdes. Los artistas para presevar su autenticidad, deben prescindir de modelos y pintar fiándose exclusivamente de su memoria. Así su arte materializa mejor sus verdaderas o verdades secretas." Mani Velibi-Zumbul. Artista y Filósofo Turco.